Noticia de alcance: Un perro pastor es encontrado en la autopista AP-7, a la altura de un municipio de Girona, cuando seguía a un camión que llevaba a su rebaño de ovejas al matadero. A Piqué, que así se llama el animal, al ver como subían al vehículo a sus queridas ovejas, a las que había cuidado con tanta dedicación, no le quedó otra opción que salir corriendo detrás de éste, y recorrió varios kilómetros, siguiendo el rastro de los rumiantes, hasta que unos operarios de mantenimiento de la autopista le han echado el lazo para ponerlo a salvo de un más que probable atropello. Esta noticia es tan cierta como que yo tengo ojos, y me ha conmovido de tal manera la historia de Piqué, que he decidido dedicarle unos versos.
EL DOLOR DE UN PERRO PASTOR
A bordo de un camión descarriado
se han alejado tus esperanzas
de mantener a tu rebaño unido
en medio de una tierra separatista.
Por el punto de fuga de la autopista
se han escapado tus ovejas,
de las que te ocupabas
como si se tratara de tus hijas.
Sin límites de velocidad,
adelantando a coches deportivos
hasta por la línea continua,
en tu afán de dar alcance
a tu extraviado rebaño,
al que mimabas como oro en paño.
Piqué, en un descarriado camión
se esfumaron tus ilusiones
de seguir manteniendo en bloque
a tus amadas nubes rumiantes.
Pomposa, Lanuda o Nubarrón
no volverán al abrevadero
rebosante de sangre caliente
proveniente del matadero.
Suena el eco de un último balido
que al retumbar en tus tímpanos
te deja en el pasto hundido.