Se cansó de ver mis huellas,
y no escribió lo que pasó.
Se borraron las estrellas,
y yo le puse esta canción.
Fuiste dándome una historia,
y ya había muerto la ilusión.
Mi guitarra y tu cintura,
fueron mi mejor canción.
Vi mil rayos de amargura,
pero nunca la luz del sol.
Camanances de sirena,
hoy arrastran mi razón,
y no hay una hora buena,
para olvidarte mi amor