Dualidades de dos almas
Podrán caer las hojas en otoño, los copos de la nieve en invierno, así como las lagrimas pueden caer en cualquier época del año por cuanto te amo y cuanto te extraño.
El amor no tiene edad, ni apaga lo que puede encender, ni atiende a razones, solo aparece, lo tomas o lo dejas, lo vives o lo dejas morir.
Amarte es abrazar dualidades que tu y yo deseamos compartir, tu como mujer yo como hombre, jugando las cartas que tenemos en esta vida esperando que todas ellas sean de corazones.
Se quien besa con los ojos, besa con la mirada, quien besa con la piel hace el amor con el cuerpo, quien besa con el corazón sabe besar con los sentimientos del alma, pero a mi me gusta besar cada parte de ti....
Quizás no necesites mas besos sino mas formas de besar, es posible que no necesites mas caricias, sino erizar la piel con una sola te te incite al orgasmo, quizás no se trata de rendirte sino de saciar el hambre de las ganas que nos tenemos.
¿Te gusta bailar?
Pues bailemos una comparsa de besos, batucadas de pasiones, obteniendo esas simetrías bilaterales de ti en mi y viceversa, y dancemos al compás de nuestros corazones como la mas hermosa sinfonía de nuestro amor.
Seamos dementes forjando huracanes de tormentas, arrasando todo a merced de nuestros anhelos, hurgando dentro de ti aquellos sabores que emergen de la tierra forjada de la pasión de nuestros cuerpos, ser esos deseos que se encienden para apagarlos ardientemente.
Seamos todo en uno, gesticulando lo que sientes cuando la condena por vivirme se vuelve inevitable, esas invasiones que hacen voraz un encuentro, un asalto a cada recoveco de tu boca, la profanación a la intimidad de tu sexo.
No te detienes por haber amado en el pasado, te detienes por no hacerlo en el presente.
Jordi Etresi