Ven
a la sombra del monte,
al nido del ave,
con tu querer omnipotente...
Ven
a los bosques y a las fuentes,
con tus vergeles,
con la eternidad de las flores...
Ven
a todo lo que existe,
al mundo que tu ropaje viste,
con tus creaciones...
Ven
dios de los amores,
para rendirte sentido homenaje,
con santas oraciones.