Te has vuelto solitaria como la noche,
Y En el día eres alegre;
¿Quién inquieta tu actitud?
Desolada, alejada
Y desamparada
Por el amor que dejaste pasar.
Cuan en luna nueva
De tu vientre se envenena…
Y destellante tus ojos miraban.
¡Oh tan solitaria!
¿Qué mezcla de dulzura cabe en tu ser?
Si no es en tu espíritu
Por el cual dejaste de ser…
¡Abre tus brazos mujer!
Que nuevas cosas vendrán,
Y da espacio en tu corazón…
Para el hombre que te quite la respiración.
Y te llene de amor y pasión,
Da un paso adelante
Y sigue tu camino,
Que tus lágrimas
Se oculten en lo más profundo de tu alma.
Y queden en el olvido
Para así mantener la calma.
Hay un mundo mujer.
Una larga vida que te espera,
Para acobijarte en su regazo.