Como he perdido mi alma, en las aventuras de la vida. Te declaro mi corazón, donde se exprese con razón, los sentimientos hacia mi amada, en sencilla prosa alada. Hazte portador de mi voz y el verso a la existencia dará sazón.
Encadenado al lenguaje, alabo la virtud del amor en homenaje escrito; cifrando el mensaje en metáforas de tu paisaje y en colores otoñales, en el corto metraje, la felicidad viste de encaje.
Mientras el viento habla del ultraje del tiempo, que viaja sin equipaje; una cosa es segura, siempre habrá un vínculo invisible entre éste corazón sustituto y mi alma perdida, en el afán de los días. La temporalidad insustituible de la existencia material, nos ata y condena a este presente eterno.
Nuevo corazón habla de lo que siento, pero no lo sientas por mí; pues las sensaciones de mis sentidos, son adquiridas y percibidas por mi existencia corpórea. Alma errante aun sin tenerte conmigo, serás mía por lo que dicen tus hojas.