Como cada mañana, despierto a tu lado
como cada mañana, tengo el deseo inmenso,
cuánto te deseo amor.
Ese amor de mañana que siento
me llena de esperanzas y energías
en nuestros dulces amaneceres,
cuando llenos de caricias y placeres
de rocío colmamos nuestro lecho.
Como cada mañana, en el momento preciso,
a la luz, tu silueta y figura,
siento llenar mis venas con tus pasiones
y es que cada mañana regreso a ese inicio,
dulce mañanero de suspiros para renacer.
Desde cada mañana nuestros brazos,
hundidos en los secretos de la piel
explorando todo nuestro gran tesoro,
sin dar cuentas ni al amanecer.
La ocasión que tenemos cada mañana,
es el motivo real para despertar
de un sueño mágico y verdadero,
la dicha de tu presencia y mi felicidad,
amor de cada mañana, que solo tú me das.