Walter Trujillo Moreno

MUNDOS PARALELOS EN EL SIGLO XXI, UN PADRE ENVUELTO EN SU DOLOR


El siglo pasado le pertenece a mi abuela y al deprimido,
el presente me pertenece a mí y al hogar en mí
el futuro le pertenece a mis Dioses y al angustiado

 

La Naturaleza no puede ocultar las estaciones
tú no puedes ocultar tus mundos paralelos
No se puede defender a nadie ocultándolo
no sé puede evitar a nadie ocultándolo
no se puede querer más sino compartiendo

El amor está más allá de la angustia,
más allá de la satisfacción,
más allá de la desesperación,
más allá del descuido,
más allá del ego,
cerca de la pobreza,
junto a la tranquilidad interna,
la inocencia,
el agradecimiento,
cerca de la belleza
el lenguaje del arte
y la creación.

Un padre se adelantó,
un padre cambio de lugar,
un padre se mudó al cielo,
un padre se fue al otro lado.
No temas no has muerto,
estás del lado de los grandes,
de los que nunca mueren,
nadie pensaría que Budha,
Jesús, Che, Luther King, Gandhi,
John Lenon han muerto.

Perteneciste a los buenos,
 a los que se entregan entero,
 a los que no se los ve porque son refulgentes
 y no se los escucha porque son silenciosos,
a los que no dudan en dar sin recibir,
a los van más allá de los límites,
 y cerca de la muerte.


Creaste un espacio,
para aquellos que recibieron de tus semillas,
ellos son los que continuarán tu misión,
ellos están dispuestos a sacrificar algo se sí…

Dios arrancaste una flor de la tierra
 hoy es estrella,
hombre arrancaste una flor de la tierra
hoy a muerto una estrella.
No temas lo oscuro y lo gris.
 La luz amarilla y violeta
de tus acciones están vivas,
corren
 y recorren.

Las dimensiones son tres,
el pasado,
el presente,
el futuro.
No existe sin mí,
sin tus cargas del pasado,
tus miedos del presente
el tiempo invertido en el futuro.

La vida es corta,
aún más corta cuando actuamos intensamente,
cuando nadie nota que nuestra flama se apaga,
 los ojos dejan de brillar,
nuestra piel palidece.
La vida se escapa en las palabras,
 pensamientos,
 simplemente dejamos de existir,
 a pasos gigantes.

Tu corazón se cansó de brindar un nido,
se cansó de dar señales de compasión,
se cansó de ofrecer soluciones,
se cansó de ofrecer calor,
se cansó de llorar a solas
dejo de latir,
dejo de ser padre y hermano.

Ahora estamos en el Universo,
 cerca del tiempo y las dimensiones,
cerca de Dios o la idea Dios.

Has muerto,
ha muerto algo de mí,
ha muerto un pedazo de la iglesia,
ha muerto una parte de México,
ha muerto un parte de la humanidad,
se extinguió una parte del Universo.


No te lloro,
no te lloramos,
no es necesario llorar,
el recuerdo al igual que la alegría
 no son deber sino un derecho,
su paso por la tierra fue corto,
tuvo tiempo para sufrir poco tiempo para gozar,
 a pesar que sufrir es no gozar
 y sufrir es perder tiempo,
sin tiempo para sufrir,
sin tiempo para amargarse,
sin tiempo para curarse,
sin tiempo para pensar en sí mismo,
sin tiempo para vivir el pasado,
descargar el pasado
 y planificar el futuro.

 

Habla solamente de mí,
 de mi historia,
de mi biografía,
no toques nada fuera de mi vida,
sólo yo te pertenezco,
nadie más,
ni al aire que respiran mis semejantes,
ni los recuerdos que encierran sus vidas,
ni las lágrimas que derraman sus ojos,
ni los latidos excesivos de mis amores externos.

Por Walter Trujillo Moreno, Marzo 2019

Poema dedicado  a la vida y labor del Padre Exiquio Francisco Estrada Ramírez de México,
miembro de la Misión Católica de Lengua Española en Berlín

Poema dedicado a las dimensiones que se cruzan en nuestras vidas y pensamientos