Carlos Gustavo Gerez

El hombre en el ventanal

Asomado al ventanal ve caer la lluvia

Sobre la inmensa ciudad,

El cristal refleja la imagen de un hombre

Que pierde su mirada hacia el norte

Buscando a su amada.

Abre de par en par el ventanal y

Lanza un beso emocionado al aire

Como esperando que la brisa

Lo pose en el rostro de esa mujer

Que en la mañana dejo dormida.

De repente, llamo su atención

Una paloma mensajera que detuvo

Su vuelo en la cornisa,

Quiso llamar su atención, amigarse con ella,

Pensó par sus adentro, que podría enviar

Con ella sus poemas cada mañana, pero el ave,

Retomo su vuelo y vio su deseo desvanecer.

Sus labios recitaban y repetían su nombre

Constantemente, como llamándola,

Como una oración.

Se iluminan sus ojos, suspira profundamente,

Gira la mirada al interior de su oficina,

Y es ahí, justo ahí, cuando observo en sus ojos,

La hombría quebrada por el encanto

Y el amor de una mujer, de su mujer me dijo,

De mi esposa, respondió a mi pregunta.

El se fue, retomando sus quehaceres,

Y yo sigiloso me acerque al ventanal

 Buscando en el horizonte la figura de esa mujer

Que quizás quedo dibujada en alguna nube gris.

 

Ni siquiera la conozco, pero llamo mi atención,

Ese hombre con la mirada perdida,

Si, perdidamente enamorado,

Como nunca antes pude ver.

Como jamás, quizás podre sentir.