Te doy todo mi amor,
te doy el azul del cielo,
te doy mis horas llenas,
mis palabras y silencio.
Te doy mi ser desnudo,
mi alma ya sin cuerpo,
los días y las noches,
la pasión y el misterio.
Te doy lo que no he dado,
la ceniza del tiempo,
la tierra endurecida
y la humedad de un beso.
Te doy la primavera,
el recuerdo del invierno,
una lluvia que no moja
y las caricias del viento.