Quiero entregártelo todo,
quedar del todo vacía de mí,
para dejarle el sitio
a tu yo que tanto ansío.
Poner los brazos en cruz
como abrazando
el mundo, sentir como me
lo vas regalando
beso a beso, pulso a pulso.
Hacerme ver a tus ojos
tan tuya, que a tu
regreso sin mí, te parezca
que has dejado atrás
la luz que iluminaba tu rumbo.
Tan tuya, tuya, tuya,
que sentirme así, es mi deseo.
Pues quiero amarte
con la pasión airada de que esto
a ti, nada te importe.
Pilar González Navarro
Marzo 2019