Tú…
Eres de esas personas
que me dejan habitándome
de una manera diferente.
Había que reunir fuerzas
para no borrarte
y arrancarte la memoria
del presente.
Había que reunir
toda la soledad del mundo
y volverla confeti
para no ver tu rostro.
Una vez, alguna vez
tomé tu alma
y la guardé en una botella.
No te vi nunca más.
Y nunca más necesité de ti.
… aún tengo miedo a esa parte mía que eres tú.