Nadie teje jardines,
nadie alumbra tus sombras.
La luna desnuda la noche,
y el mar alza sus olas.
Nadie habla sin voz,
nadie canta a las rosas.
Una estrella sigue la huella,
y tu amor me espera sin hojas.
Nadie llora sin lágrimas,
nadie ama sin flores rojas.
Mi sendero lleva a tu lecho
y en tus sábanas anida la aurora.