Amo cada parte de tu cuerpo,
Amo de tu piel de terciopelo, tiene la suavidad
De un lienzo de seda,
Tiene la fragancia que los jardines envidian,
Sobre ella, mis manos emprenden vuelos
Interminables de deseos.
Amo el reflejo de tus ojos, es mi estrella inconfundible,
Mi sol radiante, mi mar inmenso,
Son profundos, son tan bellos,
Son el refugio de mis noches eternas,
Tienen el poder de detener el tiempo.
Amo tus delicadas manos que me hacen estremecer
Son laboriosas, y construyen las más bellas caricias
Que mi piel necesita.
Amo tu boca sencillamente porque de ella,
Salen las palabras más dulces que mi alma necesita,
Rozarla me eleva al firmamento, me hace estremecer,
Me provoca, cambia mis sentidos,
Se me olvidan las cosas y muero de deseos.
Amo ese vientre donde quiero quedarme dormido,
Donde quiero quedar enredado,
Donde quiero dejar mis mejores caricias,
Donde voy a perderme
Amo tus pechos en reunión con mi boca,
Amo tu pelo donde surcan mis dedos
Amo tu espalda pues me lleva a ese lugar secreto
De mis primeras miradas, que me hizo amarte.
Amo cada parte, de tus partes, que fueron mías
Pero también amo, tu aliento, tu olor, tu mirada,
Tu voz, tu humedad, tus sueños, tus delirios,
Tus locuras y tus noches de desvelos.
Entre mis tercos brazos te sostendré y no te dejare caer,
Porque sabes Mujer,
Que te siento mía, como mía son cada parte de tu cuerpo,
Que amo y deseo.