El peor de mis miedos está lejos de ti
cuando estoy contigo.
Y va contigo cuando te alejas de mí
apartando tu ser de mis alcances
y partiendo el mío en dos mitades.
El peor de mis miedos está en función a ti
y soy su blanco...
Sus flechas en tus ojos se eclipsaron
y a los míos apuntan si te marchas
desvaneciendo tu mirada en tramontana ausencia.
La niebla, el escondite de la duda,
alterna sus andrajos hora a hora...
la función del espacio es ya nunca
la antítesis del tiempo en la memoria.
Distante estás y eso me angustia...
El peor de mis miedos es buscarte sin hallarte,
perderme al no encontrarte,
morirme en esa búsqueda.
Aquí no estás y eso me duele.
En suma, el peor de mis miedos es perderte.