Llegaste un día a mi vida, como regalo.
Con el sol en tu espalda y me cegabas...
ví tu sonrisa y despegue hasta el firmamento
ví cada flor que a tu paso se desnudaba.
Nací en tus labios como un ser imaginario
pues besarte parecía un bello sueño.
Fué tan difícil entender que te abrazaba
y mas difícil fué creer que fuí tu dueño.
Te toqué como si fueras mi guitarra
convirtiendo tu susurro en melodía
y te escuché decir mi nombre tantas veces
Como Infinito verso de nuestra poesía
Ese día descubrimos emociones
Cuando al compás de cada beso, nos amamos
Entre incontables gestos e inmensas sensaciones
sin condiciones, como fiel nos entregamos.
Y desde entonces ha nacido aquel amor
Cada sensación que nos domina.
Sea sagrada nube la que nos acogió
Donde allí entregamos nuestras vidas
La vida es una poesía