Cada peldaño hacia ti
es una madriguera
sin principio y sin fin
no sé dónde comienza.
Y sin embargo
me altera los vórtices
la tonalidad en espera
la cuarta nota musical
vibra resbalando pulsos
y esta noche sin viento
se apagará el incienso
y los deseos nuevos
no sé si podrán regarse
estos aromas de amor
por tu cielo interno.