Macuto

Crisis

Las culpas no van hacia la nada,

se apilan todas 

hasta que la crisis llega

como quien espera un ferrocarril 

y todo viene de pronto, 

tan sofocadas, tan de repente

que la rutina se escapa de mis manos  desnudas y vacías.

 

 Es en ese momento en que el universo,

creado o imaginado, 

desaparece para siempre.