En el regazo del delirio
Los regresos de los recuerdos que dormían tranquilos
En los recovecos del olvido
En el tejido más tierno de lo que se ha perdido
Ya que el amor, el placer y las nubes desaparecieron
En el cielo, las estrellas fugaces se desvanecieron en las promesas
del amor eterno, algún día estaré frente a ti sin dolor
Porque en el infierno, en los fríos inviernos
Llenos de desolación y ahora que me beses es inútil
Ahora ya no queda más escozor del amargo silencio de estar solo
Así que ahora descansa en mis brazos, los del poeta triste
Sé que estás cansada ya de caminar, no recuerdas lo que hiciste
Nuestro amor profundo se ha ido, se ha hundido
Triste y roto, en el olvido se ha dormido
No tengo idea de que significa
Sigo queriéndote por lo que habita en tu mirada
Cuando hablas de los astros con tu expresión divertida
Mi amada, jamás dejaría de amar esa parte tuya, querida
Te amo cuando tu mirada fuerte y directa
Intenta esconder que tienes tantos amores atrasados
Esos amores que son desgarrados en las tinieblas de lo profundo del pasado
Delirios que me han derrotado, recuerdos que no son míos y jamás podrán serlos
Desearía que en la triste infinita y única noche que nos queda me dijeras que estos sentimientos no son un error tenerlos
Porque de nuevo en tus ojos veo el invierno más tierno que hubo jamás
Y veo en las cenizas del infierno, aunque no lo entiendo, el horrible abrazo del pasado acusador
Ahora quiero intentar sanar todo este dolor
Recostarme en los recuerdos y flotar
He vuelto, de lo que fue y ya no ha sido
He dejado de estar entumecido
Ahora soy capaz de amarte sin delirio
Porque existe esta melancolía
Y aunque tu sonrisa tierna me lo advierte sé lo que ocurrirá
No puedo gritar y tengo esta ilusión de que siempre me amarás
Lloremos, lancémonos a la bebida de lo inerte
Amor, abrácemos a la muerte.