Alejandro José Diaz Valero

Haiku VIII

 

Manos que piden

en la mañana entera,

unas monedas.

 

Mirada triste

en silenciosa espera…

Bondad ajena.

 

Mirando calla

como gran prisionero;

el limosnero.

 

Jornada dura

va buscando alimento

¡Que sufrimiento!

 

Al atardecer

él canta como el viento,

se ve contento.