Hay una chiquilla que por el camino
Contenta pasa cual ave real,
Pero que ha dejado tras su fragancia
Un corazón inquieto que no tiene paz
Es pequeña, con caminar fascinante,
Una mirada con dulzura tierna.
Es una niña que con su faz radiante
Ha enamorado mi alma plena
Ella es mozuela para este curtido,
pero ¿que hago si me ha hechizado?
pues solo con mirarle yo he podido
consolar mi triste corazón fatigado.
La veo de lejos con sus amigos,
es un séquito cual corte real.
Es una princesa que en su cortejo
siempre sobresale por su beldad.
¡No puede ser, me ha mirado!
y en sus ojos lo pude ver
que, aunque chiquilla y traviesa,
me corresponde su amor también.