Hay un mundo
Al otro lado del universo
Más allá de los siete cielos
Es un astro inmenso
Donde no hay movimiento
Y se escuchan muchos quejidos
Y demasiados llantos lastimeros.
Son lamentos mudos.
Que ensordecen al escucharlos.
de seres que vagan silenciosos.
Son de andar lento.
Que vagan sin dejar huellas en su camino
Y no tienen destino.
Son seres que se comunican
Con clave cifrada, encriptada
Asimétrica e híbrida.
Que solo pueden leer
Los que no pueden ver
Ni entender lo que no saben.
Se hablan sin hablar
Se miran sin mirar
Y se tocan sin tocar
y se olvidaron de amar.
Es un mundo donde van
Los que no quieren morir.
Los que nunca renuncian
A los placeres del buen vivir.
Los que denuncian a los pensamientos
por agresivos y obsesivos
Y conviven con la absurda melancolía,
La especulación y la indiferencia.
Donde las virtudes
Siempre lánguidecen
Y nadie les pide que perdonen.
Y nunca jamás mueren
Autor: Antonio Encinas Carranza
De: Lima, Perú
D. R.