Que acabas mi razón y me embruteces
Mi paso firme con dos o tres copas lo vences
Y mi voz bien modulada la coges y la tuerces
Mi mirada la entornas en la nada
De mi mundo a un mundo que jamás retorna
Mi educación y buenos modales no me sirven
Porque apenas te pruebo me abandonan
Tengo amigos por mil, tú los espantas
Cuando mi voluntad la tomas y no dejas
Coordinar mis movimientos y se asombran
Del cambio radical dominada entre unas copas
A departir se dice como excusa idiota
los malos amigos, los mandas sin asombro
Y con el brindis una y otra vez tú te equivocas
Convirtiendo un excelente ser en un escombro
Maldito mil veces, licor hecho de anís dulce
Debieras ser alegría, canción y risa loca
Y sin embargo hacia el lodo tu nos conduces
Con actos inconscientes como si fuesen obras
Del mejor teatro callejero para que nos gocen
Más cuando nos vuelves piltrafas humanas
Nos abandonan las fuerzas y de eso, te fortaleces
Es cuando lamentamos haber bebido una copa
De ti, odioso licor que nos ofreces.
DOMOTA