Descubrí Tu mirada en el living,
Arremetiste con tus manos, me llenaste de caricias,
Calo profundo ese beso repentino que me diste
Vibro mi corazón, y ya, no opuse resistencia,
Se fugo hacia mí, esa sonrisa de tu rostro,
Me invadió la esencia de tu piel
Y me derretí entre tus brazos
En aquel sillón que fue testigo
De esas provocación que me causo
Con solo una mirada tuya.