Bebo en fuentes de aguas cristalinas
para saciar mi amor, que es transparente,
esa pasión sin titubeos, sin fisuras,
es un reflejo de luz clarividente.
La pasión que ciega mis sentidos
me impide discernir si soy amado,
deberia ser más cauto y precavido
para evitar así lo indeseado.
Es la idea de un amor dulce y perpetuo,
una ilusión que me mantiene encadenado,
ese sueño que me colma de alegría
sin temor a estar contigo equivocado.
J. Piñeiro