Ahora que nadie me ve
que el silencio reina mi morada
es momento de atender
las inquietudes de mi alma.
Por los más bonitos rincones
que decoran mis recuerdos
paseo en busca de cavilaciones
pensamientos, imágenes, sueños.
Ahora que estoy muy tranquilo
que no me visita aún el sueño
no me quiero quedar dormido
si no es escribiendo tu anhelo.
Qué no me fallen las fuerzas
que contigo quiero dormir
que sea mi último esfuerzo
la palabra más bella para ti.
Esperanza, amor, te quiero
no sé cual de ellas regalarte
pero, ahora que lo pienso
lo mejor, junto a ti, despertarme.