Tu vida me cambió la vida
tu vida le dio sentido a mi vida.
¿Por qué?
Porque tu modo de vivir
me enseñó como vivir
tu modo de sentir
me enseñó como sentir.
¿Por qué?
Porque tu manera de servir
me enseño como servir
tu manera de morir
me enseñó como morir.
¿Por qué?
Porque has hecho con tu vida
una sinfonía de como vivir,
de como sentir, de como servir
y de como morir.
¿Por qué?
Porque me enseñaste
con el ejemplo
que amar hasta el fin
es lo único que de mi
podré dejar en este mundo.
Que mi cruz podrá ser una pesada
pero al llegar al final no habrá más porqué.
Será una sola pregunta
y una sola la respuesta.
¿Por qué?
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 3, 16
Claudia Viviana Molina