Anngiels Simplemente Mujer

UN LUGAR DE ENCUENTRO

Cada esquina es un lugar de encuentro, cada café, cada galería, cada vereda, cada plaza

es el lugar indicado para cruzarme con tus ojos. Mis pupilas se pierden en cada transeúnte buscándote. Imagino verte salir de algún zaguán o algún comercio, cruzar nuestras miradas y quedarnos tildados, uno frente al otro con el asombro dibujado en el rostro.

Imagino quedarnos mudos por la sorpresa; tu voz grave tratando de pronunciar mi nombre y yo muda tratando de saborear el tuyo.

Cada esquina es el lugar esperado. Mientras cruzo la calle, el semáforo me hace un guiño.

Espero encontrarte en la vereda de enfrente, el cabello despeinado por el viento,

el desenfado de tus gestos y tu modo de vestir, tu sonrisa franca y espontánea, pero el tiempo pasa y nada ocurre. Las esquinas, los cafés, las veredas, las plazas se convierten en bulliciosos aglomeramientos de personas donde tu imagen se pierde…se diluye…se escapa…entonces mis ojos pierden la esperanza de encontrarte.

Mi caminar se hace lento…pesado…me pierdo en la cola de un subte y desde el vagón que se aleja veo tu rostro taciturno apoyado en la ventanilla. Tus ojos no me ven…y el encuentro quizás no se concrete nunca.