SILENCIOS DEL PASADO
Llegó el silencio solo,
espeso e incorpóreo.
Profundo y sinuoso.
Un negruzco suceso.
Un infinito dentro,
de un latido de tiempo.
Un universo entero,
en un simple bostezo.
Un soplo de silencio,
sobre la voz quebrada.
Un suspiro de viento,
en la mente callada.
Sobrecogido el ánimo,
en el silencio átono,
de una paz alumbrada.
Un silencioso páramo,
en la noche acolchada.
Una sonrisa hueca,
en la pausa pautada.
La mirada sin luna,
que en la mudez anida.
La caricia fallida,
silenciosa y cautiva.
Muda sombra que acude,
a la lejana bruma.
Un beso que se ofrece,
en silencio sin prisa.
Una palabra síncrona,
con una nota tímida.
Una brisa marina,
perfumada de espuma.
Una brizna de ola,
acunando al vigía.
La belleza en silencio,
de la música íntima.
El acorde armonioso,
del temblor de la risa.
Una voz enmudece,
en la pasión que ardía.
Sobrecoge el quejido,
que se abate al sentirla.
Irisados silencios,
soñadores, se olvidan,
en la profunda calma,
quedos quedan sin vida.
En el mutismo líquido,
de la mirada mística,
se devoran los ojos,
en silenciosa orgía.
Pausa entre los enojos,
que apaga la agonía.
Gritó silencio la vida,
con los labios apretados.
En mudo gesto cautiva,
en los onerosos vahos,
del aliento que la mima.
Las silenciosas caricias,
se apoderan de la prisa,
dando paz a las arterias,
que se desbocan altivas.
Silenciosamente vivas,
las células se apaciguan
El amor así condensa,
en un instante la vida.
Silencio dijo callando,
y sin hablar escuchó,
los sonidos del pasado.
A.L.
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20/04/2019