Nhylath

¡Alegre amanecer!...

¡Que alegría!...

Despertar y darme cuenta

que el DIOS DE LA VIDA

me ha regalado un dia más

de existencia!...

Poder abrir los ojos y exclamar

¡Gracias, mi Dios

por tantas bendiciones 

recibidas hasta el día de hoy!...

¡Gracias por este maravilloso amanecer

donde he podido ver los nuevos 

rayos del sol...

escuchar el canto melodioso

de los pajaritos,

de esos turpiales y azulejos

que me despiertan cada mañana

con el golpeteo de sus alitas

paseándose de rama en rama 

de los árboles sembrados

en mi hermoso jardín,

extasiándome con su canto matutino, 

escuchando la entonación

de sus notas musicales

y recibir mensajes sonoros 

de los Ángeles que penetran

en mi interior!...

¡Gracias, Señor, 

por permitirme celebrar otro

23 de abril !

Nhylath