Una noche más de insomnio,
no logró conciliar el sueño,
de las redes ha surgido,
una dama que es mi dueño.
Ha dado luz a mi vida,
cuando el amor se apagaba,
aflorando sentimientos,
que en mi vida ya no estaban.
Me cautivaron sus ojos,
me enamoro su mirada,
despiertan pasión sus labios,
yo, sin su amor, no soy nada.
Vuelan pétalos de rosas,
cuando renace el amor,
en su aroma está la esencia,
la esencia, es eso, el amor.
J. Piñeiro