EN CADA YEMA TU NOMBRE
En cada yema
de mis dedos, tu nombre gravado
perdura.
En cada célula de mi cuerpo
bulle.
En las esquinas
de mis cabellos se encuentra.
En la sangre
de mis venas permanece.
Mis pensamientos
en mil suspiros cabalga,
sin cesar a voz en cuello
lo clama.
Sus letras mi cuello engrillan,
cual rosario de gotas de rocío
que por los amaneceres
los pétalos de las flores coronan.
Sus letras
cosidas llevo en la existencia,
en el aliento,
en el pensamiento.
Al exhalar mi primer respiro,
en la mente se gravó.
Sus iniciales
pintados en cada hoja de los árboles,
en cada piedra lo descubro.
Las nubes lo invocan, los ecos lo repiten.
Mi alimento es.
Bambam