Desde la senda al camino
pasando por la quebrada
llego a una angosta vereda
que me lleva a la montaña.
Alli conviven acebos
con brezos y pastizales
exuberantes retamas
y arbustos ornamentales.
Todo es belleza en la cima
se respira paz y calma
estan cerca las estrellas
todo es sosiego en mi alma.
El crepúsculo y la aurora
el amanecer y el dia
la soledad me acompaña
la montaña es poesía.
J. Piñeiro