Santiago Miranda

El orden es un dios que nos mantiene atados

 

Al cuello del sentido que deviene en duda
Una duda estrellada hasta quebrar con ella
Indiferente entre el bien y el mal, asfixia y falta
A su tiempo partiendo de ruina en ruina cada cuello

Enquistado todo espacio en su control severo
La conquista indiferente de la carne trémula
Hambre metafísica y número primero, difícil es
Sacarnos toda lógica, y pensar desde el desamparo
Bagaje cosmisco de vacío y nada del cielo

En la posición de lo postparadigmático
El perpetuo conflicto interno, movimiento
De los cuerpos que danzan por unión y equilibrio Frenéticamente entregados a su influjo
Toda energía dispuesta a su juego

Ante la derrota inminente; equilibrio preponderante
Dejar ir y salir, ante la injusticia nata
No conformarse, sino ir en contra, ir
De lo dado por la historia, hasta salir del tiempo 

25-11-18
27-4-19
29-4-19