ENTRE DUDAS Y CERTEZAS
Se tambalea en el alambre.
En equilibrio, en el filo,
de la afilada cuchilla.
Asomándose en el borde,
del abismo que le espera.
En el quicio de puntillas,
de la esperanzada puerta.
En el prólogo sin nombre,
de la vida venidera.
Se ha vestido la vergüenza,
con sus ropajes de seda.
De abalorios adornada,
de ricas telas y perlas.
En sus brillantes reflejos,
se esconde la cara negra.
La careta reluciente,
de una nefasta opereta.
El rostro bien aceitado,
de una máscara de cera.
De aire se llena el suspiro,
de viento la ardiente hoguera.
De perfume la nostalgia,
para soportar la pena.
Golpes de aliento la risa,
vestida de primavera.
De pasión late el amor,
confundido con la prisa.
Así, nace la sonrisa,
taimada o de corazón.
La Luna cerro los ojos,
ante tamaña locura.
En su rostro plateado,
asomaba la cordura,
en un gesto de reproche,
por tanto dolor y hambruna.
El Sol se asoma en el monte,
con ojos de calentura.
Sus rayos dándolo todo,
ardiendo por lo que mira,
en las sombras matutinas.
La duda habita en el centro,
donde el saber dilucida,
lo que requiere el talento.
La duda nace del sabio,
como en el necio termina.
Se tambalea la verdad,
sobre la delgada orilla,
por donde camina el sabio,
entre dudas, de puntillas.
Cree el necio ser poseedor,
de la muerte y de la vida.
La sombra se ha vuelto luz,
entre la duda que oscila,
en el viejo tragaluz,
que cuelga de sus orillas.
La noche fragua sus cuitas,
entre grises pesadillas.
Entre los tibios sopores,
donde el tiempo se arrodilla.
El sonido se congela,
entre guedejas que brillan.
La rosa multicolor,
sembró su olor en la brisa.
Se sublimaron las voces,
en sudores de la alquimia,
de los duendes protectores.
La noche volcó su esencia,
entre quejidos y risas.
A.L.
http://alupego.blogspot.es
29/04/2019