yo no escogi ser poeta. nunca imagine serlo;
pero el sino de la vida me lo trazo en mi destino.
la poesia, para mi, solo era una utopia,
como un lucero que se contempla en una noche estrellada.
no busque ser poeta, pero a veces, la vida te obliga
a hacer cosas que tu no quieres...y fui poeta.
cuando las penas del alma te embargan,
y no tienes a nadie en quien confiar,
solo la poesia te puede ayudar.
vi a la poesia como a una amiga que nunca tuve,
encontre consuelo en su silencio imaginario y dulce,
y aun mis lagrimas mas amargas en su seno cobijo.
puedo decir que vi a la poesia como una terapeuta,
la mas discretas de todas las psicologas, la mas discreta.
y pude confiarle a ella mis penas, mis temores,
mis certezas, mis desamores.
yo no veia a esto de ser poeta como un don, como un talento,
solo como una via de escape para mis desazones y desalientos.
hoy puedo darle gracias a Dios por lo que soy. un poeta.
pero insisto: no busco la fama, ni el renombre,
tan solo dejar mi huella plasmada
en cada letra, de cada rima, de cada verso,
de cada poema que pueda en mi florecer. nada mas.