Sigo añadiendo cosas a la lista de planes que nunca haremos.
Hoy escribo: ver el último capítulo de GoT enredados en una manta y comiendo palomitas.
El jueves escribí: volver a besarte.
Miro el móvil cada dos minutos esperando un mensaje en el que digas que quieres verme.
Pienso en el viernes y deseo con todas mis fuerzas que estés en la esquina esperándome.
Me he vuelto tan dependiente de tu atención que ya es patológico.
Veo fotos de parejas y me dan envidia. Sé que nunca seremos nosotros.
Aunque me conformaría con ser los que están de fondo riéndose.
Como si el amor tuviera sólo una forma.
Añado otro plan a la lista: ir al Ikea juntos como si fuéramos Tom y Summer.
Y otro: querernos.