Si le brindo mi mano
es que quiero ser su amigo,
si le doy mi corazón,
es que mi amistad usted gano,
pero si al mirarla a los ojos,
siento que late mi corazón,
será que en usted he descubierto el amor.
La he esperado por horas,
con usted quería un encuentro hoy,
pero usted me ignora,
¿no deseas saber de mi?
Olvido mis palabras pasadas,
las promesas de vernos siempre
no recuerda que entre lagrimas me dijo,
estoy muy sola tus palabras duelen.
Anoche mientras dormía,
la traje a mi lecho,
le hice el amor,
la bese con desespero,
usted gritaba
mis caricias necesitaba,
usted sentía como la hacía mía,
usted con su piel retribuía,
usted mi nombre repetía.
La llamo,
no me escucha,
se esconde,
es sorda,
Olvida sus promesas de entonces,
no desea decir mi nombre,
es que hay alguien
que a usted más le importe,
fui solo charla de un día.
Sé que su lecho dueño tenia
pero jamás pensé que su corazón
a otro pertenecía,
no entendí cuando decía,
que alguien un día
la despertó de la apatía
que su matrimonio vivía,
Con palabras ardientes
despertó usted,
si alguien a usted entrega,
sus horas de amor perdido
no me escucha,
no puede,
su atención es para él,
he llegado tarde
he perdido.
Ahora me hablas,
me dices te he ofendido,
sangras por la herida causada
por mis verbos encendidos,
si me permites,
te cuidare,
te coseré con mis labios,
te daré puntadas de besos
para que no sangre tu corazón herido,
te cuidare con esmero,
te amare con delirio
y cuando sanes,
te quedaras,
vivirás para sentir mis latidos.