Un corazón de fuego
es ese que arde en la fragüa de mi pecho
cansado y dolido, y un poco maltrecho
se derríte lentamente
y no hay nada que lo apague
ni el agua fresca de la fuente,
las llamas se alzan sublimes
llegan hasta el firmamento
matan y queman a diarío
mis amores y mis sentimientos
son la espuma del alma
que se quiebra con mi aliento,
¡ quien pudiera apagar
esas llamas, que son mi tormento !
Un corazón de fuego
en el alma llora derretío
me roba la risa y la calma
y hasta mis cinco sentíos
de noche, tarde y de mañana
arde y arde la llama
¡ yo no se como voy a apagarla !
¡ que poco queda de este corazón mío... !
Y me siento a la sombra de mi casa
para verlo arder, ¡ por favor, darme agua !
que yo quiero ahogarlo
apagando el carbón de esa fragüa...
Y siempre me levanto temprano
porque la noche siembra locuras
me duele casi toda el alma
tiene fiebre, y me tortura,
y ya no puedo hacer caminos
porque me falta la ternura
¡ se me han olvidado tantas cosas !
como un niño pequeño me arrodillo
delante de mis cuatro rosas...
A veces lloro como un chiquillo
que quiere atrapar una mariposa
soy un árbol ya caído
que ha perdido todas sus hojas,
a la orilla de ese camino
que ya no tiene sombra
los pájaros no pueden hacer nido
soy un barco pequeño
que en la mar anda perdido...
¡ Dime si sabes, marinero
donde tiene el ancla, este destrozado velero ...!
Quiero un corazón que palpite
dentro de un cuerpo nuevo
porque el que tenía se ha quemado
era de humo y de fuego,
pero aunque viejo, aún vive enamorado
en la locura de un espejo...
Hoy me paro, me siento cansado
y me siento en un banco de hierro
que yo mismo he forjado
en los caminos del tiempo
¡ hay tantos caminos
ya casi olvidados !
que hacen sombra a mis pensamientos
en la laguna que lleva al alba
allí en la fragüa que contemplo
soy herrero y estoy forjando
un corazón de fuego...