Vienes a mi como
el alba, tranquila
y silenciosa, llenando
de luz mis parajes,
a besarme con
tus labios de rosa.
Vienes a mi como
el tibio atardecer
vestida de lirio
a alegrar mis sueños
y pintar el cielo
de luciérnagas,
y de oscuras
perfumadas mariposas.
Vienes a mi como
la noche a abrazarme
como una sombra
y me arrancas suspiros
al tocar tus senos
de luna ardiente
y blancas caracolas.