Bernardo Arzate Benítez

El rostro limpio.

 

 

 

Ya no se me pega el polvo en la humedad de mi rostro,

aquella humedad que me dejaba el llanto,

y que nublaba mi vista,

dejándome el rostro sucio,

Por que mis lágrimas, ya no existen.

 

Tú hiciste el daño y yo pagué por ello,

¿No es eso una ironía?.

por mucho tiempo fui tuyo,

pero tú núnca fuiste mía.

 

Núnca pensé que hubiera despedidas dulces,

en mi vida; ahora se que las hay:

cuando le dije adiós a mi rostro sucio,

para ahora, tener otro rostro:

¡El rostro limpio. No más lágrimas !

--------------.......----------------------

 

Autor:Bernardo Arzate Benítez