Jose de amercal

A MI ESPOSA

 

Caminando por el sendero,

por un lado, por la orilla,

a dentro de un agujero,

!!una Rosa Amarilla!!.

 

Me detuve para mirar,

la belleza de esa rosa,

sin dejar de recordar,

a mi querida y amada esposa.

 

Regrese por aquel sendero,

haber si se había marchitado,

mas no la encontré en el agujero,

pues ella estaba ya a mi lado.

 

Esa rosa en el camino,

tan delicada y preciosa,

no era mas que el recuerdo,

de mi adorada esposa.