Enséñame a traducir tu corazón.
A escribir sin razonar desmedidamente.
A decir no y quedarme clandestina.
Júrame tus besos desalmados.
No alucines con un vínculo eterno.
Ni mastiques un amorío pasajero.
Exhíbeme en la multitud mas no tomes mi mano.
No pienses para no pensar yo.
Tómame como dama y no como puta.
Tráeme abrazos que calmen mi destierro.
Arráncame tres orgasmos por minuto.
Puestos tus ojos en mis ojos y no en mi culo.
¡Uff, me mata que mires mi culo!
Míralo, con morbo y luego posesión.
Pero no lo mires excesivo, no es para ti.
No te enamores, enamórame.
Y si te enamoras, no esperes que este enamorada.
Háblame de tus sueños con otra.
No sueñes conmigo.
No me pienses.
No me ames.
Ámame cuando estés listo.
Y que no esté lista yo,
Porque aseguro al cielo que no te dejare ir.
Dime amor y romperé los juguetes y mentiras.
Te abriré al fin mis alas.
Por los mil infiernos.
Que si te aferras y me suavizas,
buenos días a la perdición.