yito

No compran las monedas.

 

 

 

No compran las monedas el mañana

sé que de eso el mundo aún  no es consiente.

Son pocos los que al sol en su ventana

no lo sienten como algo indiferente.

 

De más está que suene la campana

diciendo que el ayer ya es un ausente

la dicha pareciera estar  lejana

borrando la sonrisa del presente.

 

De todo amanecer, el venidero

pareciera del hoy, ser el arriero

negándole la dicha en su porfía.

 

Condenado a ser viento sin destino

del alma el hombre, no libera el trino

que al presente le brinde, su alegría.