Acaso...
no te diste cuenta,
la nuestra es una sociedad
esclavista pero sin cadenas,
mírate la cicatrices
aún las conservas...
en tobillos, manos y piernas,
nunca la libertad
fue una realidad tan ausente...
como en los tiempos
que nos ha tocado vivir,
cada día
nos enajenan
un derecho...
a cambio de una nueva obligación.