Cuando yo miro hacia el cielo
Y contemplo las estrellas,
Entre tantas cosas bellas,
Brillas tú cual gran anhelo;
Cuando sufro en mi desvelo
Por mis pasadas querellas,
Tú te muestras sobre de ellas
Y me cuidas con gran celo;
Eres ángel que me cuida,
La dulzura de ese beso;
Esa tierra prometida
Do yo gozo al vivir preso;
Eres mujer consentida:
Dulce y eterno embeleso…