Tengo la manía
de jugar con la arena de tu cuerpo
donde las playas son las fronteras
de escultura de Miguel Ángel
construyó castillos en la bahía de tu espalda
y en la puesta de sol
de tus ojos mar
me interno, me sepulto
y me entregó a tu canela piel de verano
como un náufrago.