claudia figueroa

SU DESTINO

En sus manos forja su destino

arrebatado del propio cielo 

la victoria es su mayor consuelo 

con cada paso entre su camino

y embriagada su alma como el vino. 

 

Con brillo profundo en la mirada

marchando va el valiente guerrero

sin dejar de lado todo su fuero

que surge al blandir alta la espada

sin perder en el campo de batalla.

 

Su mirada se cruza al enemigo

busca la protección de la luna

pues sabe que la guerra es segura

y  guía sus pasos el camino

conquistar la gloria, su destino.

 

Por los montes secos y escarpados

allá donde la sangre ya brota

donde sabe a gloria o a derrota

los guerreros entre sí lucharon

y los dioses peleando a su lado.