No te has dado cuenta
y debo recordártelo,
tengo vida propia.
Camino, pienso y escribo poemas,
porque mi vida me pertenece.
Tal vez quisieras
que estuviera abandonado en un rincón
hasta que tú decidieras
mover los hilos para que pueda vivir,
poner palabras en mi boca para hablar
si así fuera te equivocas,
cómo tú, tengo vida propia,
con futuro, planes e ilusiones,
respiro, duermo, sueño, vivo,
igual que tú.
Me gusta divertirme, igual que a ti,
voy al baño, siento hambre, como tú,
no estoy en un rincón
esperando que muevas los hilos
para levantarme.
Tengo vida…
no soy tu marioneta