Puñalada maldita,
flores muertas y desvanecidas....
sombras amargas y marchitas,
me dejan descansar entre sus cenizas.
Vivo de la guerra,
de espada castiza,
me golpea la ventisca,
como ola que golpea la roca,
me convierto en su ánima...
sola,despiadada y sin suaves caricias,
flores muertas y desvanecidas
que corren en mi cuerpo como hormigas,
soy viento y dulce melodía.
Vivo en batallas,
entre nubes negras de mi cielo,
he respondido a mi santo anhelo,
colmo abastecido y sonoro llanto,
flores negras de mi alma que juegan en mi campo verde.